martes, 22 de marzo de 2016

La psicología forense

Introducción:
La psicología y el derecho encuentran su coincidencia en el hecho de que ambas disciplinas son ciencias humanas y sociales y en que comparten el objeto de intervención: la conducta de las personas. En palabras de Munné (1987), “son ciencias llamadas a entenderse como ciencias humanas del comportamiento y sociales”.

Conceptos

Psicología Jurídica (definición)
Comprende el estudio, explicación, promoción, evaluación, prevención y en su caso, asesoramiento y/o tratamiento de aquellos fenómenos psicológicos, conductuales y relacionales que inciden en el comportamiento legal de las personas, mediante la utilización de métodos propios de la psicología científica y cubriendo por lo tanto distintos ámbitos y niveles de estudio e intervención ( Psicología aplicada a los tribunales, psicología penitenciaria, psicología de la delincuencia.

La psicología forense
Etimológicamente el término “forense” deriva del latín “forensis”, referido al forum de las ciudades romanas; la plaza donde se trataban los negocios públicos y donde el pretor celebraba los juicios. Por tanto, la palabra esta referida al “foro” o lugar donde se administra justicia. “Sitio en que los tribunales oyen y determinan las causas”

El principal requerimiento que se realiza al psicólogo forense es la elaboración de peritajes psicológicos
La necesidad de la intervención de los psicólogos como peritos en los diferentes procedimientos judiciales no es nueva, se viene planteando desde principios del siglo XX (Ibáñez y Ávila, 1990)

Ejemplo de las intervenciones más frecuentes en los diferentes ámbitos:

- Derecho Penal: se valoran cuestiones como la responsabilidad criminal en casos de trastorno mental de un acusado (evaluación de la imputabilidad del procesado), la competencia de un individuo para ser juzgado o para prestar testimonio, las secuelas de las víctimas, etc.
- Derecho civil: principalmente procesos de tutela e incapacitación de adultos, internamientos psiquiátricos involuntarios, protección de menores, valoración de daño y secuelas psicológicas, etc.
- Derecho de familia: temas de adopción y privación de derechos parentales de los progenitores (patria potestad), en la atribución de la custodia de los hijos en caso de divorcio, nulidad y separación, recomendaciones sobre planes de comunicación y contacto, adopciones, filiación, etc.
- Derecho laboral: valoración de daños y secuelas psíquicas a accidentes o situaciones de trabajo, etc.

El Dictamen Pericial:
El objetivo último de la evaluación psicológica forense es elaborar el Dictamen Pericial correspondiente al objeto de litigio. La acción del reconocimiento técnico del objeto del debate es conocida como peritaje o peritación.

Ética del perito psicológico

El trabajo del psicólogo forense debe comportar una gran exigencia científica y ética. De hecho, en las Directrices Especializadas para psicólogos forenses (Sociedad legal americana y división 41 APA, 1994), se especifica, entre otras, la obligación del psicólogo forense de seguir los estándares éticos más elevados de su profesión y la de mantener actualizados los conocimientos del desarrollo científico, profesional y legal dentro de su área de competencia.

viernes, 18 de marzo de 2016

¿QUÉ ES SER UN ESTUDIANTE EN LÍNEA?

 El proceso de aprendizaje en la modalidad de estudios en línea se lleva cabo en un Ambiente Virtual de Aprendizaje, el cual es un espacio pensado y diseñado más allá de los alcances de la formación y la información, engloba una visión conjunta del como se enseña pero sobre todo del como se aprende y se elabora a partir del establecimiento de objetivos de aprendizaje, incorporando actividades y experiencias de aprendizaje estimulantes.

El Rol Del Estudiante En Línea

De ser pasivo a ser proactivo: El estudiante en línea se distingue porque tiene una actitud de ir al frente, ya no esperar a que sucedan las cosas o que el profesor le indique lo que tiene que hacer, se convierte entonces en el actor principal del escenario educativo, deberá tomar un papel activo, de involucrarse en el proceso y prepararse significativamente para participar en el curso.
 De la exigencia en la participación: en la modalidad en línea existen recursos tecnológicos que generan registros para que el docente o la figura académica correspondiente identifique si el estudiante participa o no, lo cual puede promover un desarrollo significativo del sentido de la autocrítica del estudiante en la dinámica grupal.
De la estática entre tiempo y espacio a la dinámica autogestiva: El estudiante en línea no se encuentra sujeto a los horarios y a los espacios físicos para dar paso a la autogestión; el mismo es quien determina donde, como, cuando, y cuanto estudia. Es así que cualquier persona con acceso a internet puede estudiar en línea en cualquier lugar y en cualquier momento. A lo anterior hay que agregar que pese a que la modalidad de estudios en línea es flexible existen tiempos de entrega.
Del seguimiento académico: Si el estudiante de la modalidad presencial tiene una duda o inquietud, no siempre la externa al profesor y el grupo de compañeros, por causas de diversa índole, en el caso del estudiante en línea existe la facilidad de compartir las dudas en público (mediante foro de discusión) así como en privado (mensajería interna, correo electrónico), para ambos casos deberá ser paciente y esperar la respuesta del Docente.
De la interacción grupal y con el docente: El estudiante en línea interactúa principalmente con los contenidos (multimedia, interactivos, entre otros) del ambiente virtual de aprendizaje. En un segundo plano el estudiante en línea interactúa de manera asincrónica con el docente en línea (al cual también puede denominarse Asesor, Tutor, Guía, entre otros) y con los compañeros de curso, en otras palabras cada estudiante en línea podrá interactuar con sus pares y docente
De los aportes de la internet y la riqueza del conocimiento: El estudiante en línea contará con una serie de materiales recomendados por los desarrolladores del curso, el docente también podrá sugerirle materiales extra para reforzar el conocimiento.

Recomendaciones Interpersonales Para El Estudiante En Línea

Como parte de un aprendizaje en el manejo de las emociones resultan útiles las siguientes recomendaciones;
Identificar e interpretar, controlar, manejar, comprender nuestras emociones, ante las circunstancias, para atender y entender a los demás
Saber tratar con los demás, influir positivamente, motivar e inspirar, trabajar en equipo y mejorar la manera en la que nos comunicamos.

Retos Para El Estudiante En Línea

Adoptar una actitud crítica y creativa de las Tecnologías de la Información y la Comunicación y participar activamente durante su formación académica.
Cuestionar, replantear, investigar e idear nuevas formas de descubrir, con el impulso de seguir explorando y generar la oportunidad para obtener más conocimientos.
Adaptarse al trabajo en un entorno cambiante, valiéndose de la creatividad, la comunicación, la colaboración y la resolución de problemas.
Optimizar la comunicación escrita, prácticamente es el recurso más sólido para expresarse en la modalidad en línea, por lo que se deberá optimizar el uso de la gramática, sintaxis y semántica.


El ser un estudiante en línea implica ciertos saberes, actitudes, retos, exigencias, ventajas y compromisos, pero sobre todo la disposición de aprender, la educación en línea no tiene por qué concebirse como fácil o difícil, el estudiante en línea tiene ante sí la oportunidad de marcar su propio ritmo de aprendizaje y de trazar sus horizontes de estudio de acuerdo con sus metas académicas.